03 enero 2012

Desde el rincón de mi cama

Como siempre escribiendo estas líneas diciendo que ya hace rato que no bloggeo en forma, pero como los años nuevos y esos rituales propositivos, termina uno poniendo otros deberes por encima de los placeres.
En fin, el día de hoy este escrito es para rendir un pequeño homenaje, una quiza insignificante pero muy sentida ovación para quién estos últimos tiempos ha demostrado ser una valiente persona. Y digo valiente porque a pesar de los cientos de manias y desvarios que me salen a díario ha sido capaz de soportar, de comprender y porque no, de ser complice de ese juego macabro y peligroso al que algunos llaman amor, al que yo llamo amor.
Sería posible llenar cien cuartillas para describir cada instante cuasi perfecto en el que me has enseñado a disfrutar los silencios, los lenguajes ocultos que solo tu y yo podemos entender. No vale este pequeño tramo de letras como un cupon canjeable para quitar las tristezas que te agobian, ni mucho menos para resarcir los daños que he causado, la sequedad de mis palabras que a veces solo salen por destajo para sobrellevar la jornada.
Simplemente el tipo que escribe te llama a que des vuelta al ruedo, a que te sientas orgullosa por tus triunfos, a que sepas que le has robado los suspiros y que le has puesto mil horizontes en su mismo horizonte, que si no hay perfección que cerca andas y que si el amor no existe, has encontrado el arte de recrear la utopía.
No basta un rincón de mis entrañas, ni una palabra, ni dos ni tres,lo único que te deseo
es un Feliz Cumpleaños amor,felicidades Daniela.